Una dueña quiso regañar a su adorable perrito después de que éste se comiera la basura de la casa, pero como ya conocía su reacción en estos casos, la mujer decidió grabar el momento para compartirlo con sus contactos.
El resultado es un divertido vídeo de un minuto de duración en el que el perro muestra todo ese arrepentimiento y ternura posible que rara vez mostramos los humanos.